En nuestro país somos pocas las personas que sabemos o conocemos del trabajo que realizan los archiveros o archivistas, sin embargo son muchas las instituciones y empresas que cuentan con su conocimiento y experencia para organizar los documentos y conservar su información. El primer deber del archivero es poner esta información a disposición de las personas que la necesitan. Sin embargo el archivero encuentra muchas dificultades en su formación académica dado que solo puede desarrollarse profesionalmente en la Escuela de Archiveros y no en las universidades y centros de formación superior como si sucede en otros países de Latinoamericanos .
La historia del Archivo Nacional comienza en la época de la Independencia. Los documentos oficiales del gobierno colonial que se encontraban en Palacio de los virreyes fueron trasladados al Convento de San Agustín, Alberto Ulloa cree que antes fueron llevados a Santo Domingo, pero esto no ha sido comprobado. Los documentos permanecieron almacenados en el convento de San Agustín hasta que en 1859 el general Manuel de Mendiburu se interesó en rescatar estos documentos abandonados.
La Dirección Nacional de Archivo Histórico
Conserva los testimonios escritos de los acontecimientos que han protagonizado los peruanos en cinco siglos de historia. Estos testimonios tienen valor permanente y por ello constituyen la memoria histórica de la Nación peruana. Progresivamente van incrementándose y enriqueciéndose con los nuevos documentos que al adquirir la categoría de históricos se van incorporando a este archivo para conservarlos y protegerlos a perpetuidad.
La Dirección de Archivo Colonial
Resguarda documentación que data desde los primeros años de la conquista. Cuenta con quince fondos documentales institucionales, tres fondos fácticos y siete colecciones, entre los cuales podemos citar los de “Cabildo”, “Superior Gobierno”, “Tribunal de Inquisición”, “Real Audiencia”, “Compañía de Jesús”, “Protocolos Notariales”, “Campesinado”, “Colección Terán”, entre otros. El documento más antiguo que custodia este archivo y constituye una joya documental es el denominado “Protocolo Ambulante de los Conquistadores” o también llamado “Libro Becerro” que data del año 1533 y está constituido por las primeras escrituras públicas que realizaron los conquistadores españoles dando testimonio de las operaciones de compra y venta, poderes y escrituras de compañía, etc.
La Dirección de Archivo Republicano
Actualmente custodia y conserva 64 fondos documentales que datan desde el año 1821 hasta el 2005. Entre las series documentales de mayor importancia se encuentran los “Impuestos sucesorios”, “Aguas de regadío”, “Marcas y patentes”, “Tierras de montaña”, “Asuntos indígenas”, “Archivo Agrario”, “Registros de inmigrantes”, “Movimientos migratorios”, “Planillas de remuneraciones”, “Protocolos de autopsia”, “Autógrafas de leyes”.
